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El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), a través de la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (SEIASA) ha puesto en marcha las obras de ejecución de una planta fotovoltaica de 4 MWP y mejora de la eficiencia energética de las estaciones de bombeo incluidas en el proyecto de modernización de los Riegos del Viar (Sevilla), por un importe de 3.257.142,23 euros (IVA no incluido).
Esta actuación, que se enmarca en la fase I del “Plan para la mejora y eficiencia de la sostenibilidad en regadíos” del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), beneficiará a 1.800 regantes que cultivan 11.500 hectáreas en los términos municipales de Cantillana, Villaverde del Río, Alcalá del Río, Burguillos, Guillena, Salteras y La Algaba (Sevilla).
El proyecto consiste en la construcción de una planta fotovoltaica en el término municipal de Alcalá del Río, junto a la estación de bombeo Herreros de la comunidad de regantes, para sustituir parte del consumo procedente de fuentes de energía convencional por renovable, además de reducir costes energéticos y emisiones contaminantes.
Por otra parte, la modernización energética se completará con la instalación de dos variadores de frecuencia en las estaciones de bombeo Herreros y Alamillo de la comunidad de regantes para mejorar la eficiencia energética de ambas.
Las obras están financiadas por fondos Next Generation de la Unión Europea y su carácter público-privado supone que la aportación pública será de un máximo del 80 % del coste de los gastos elegibles, mientras que las comunidades de regantes y usuarios aportarán el resto.
Las nuevas infraestructuras son complementarias a la modernización realizada con anterioridad por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través de Seiasa, en esta zona regable y que consistió en la implementación de un completo sistema de riego a presión mediante una red de distribución por tuberías enterradas hasta parcela, que además cuenta con un moderno sistema de gestión del riego por telecontrol.
Esta modernización del regadío ha permitido hacer frente a la escasez de recursos disponibles, ahorrar hasta un 25 % de agua para el riego y reducir los costes de producción hasta en un 35 %.
