El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha presidido este viernes en Ourense el acto de firma de una adenda al convenio de colaboración suscrito entre la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (SEIASA), adscrita al ministerio, y la comunidad general de regantes Nova Limia, por la que se eleva a 35 millones de euros, financiados con fondos Next Generation, la modernizar los regadíos de Nova Limia (Ourense).
El ministro ha destacado el alcance social de esta inversión, porque va a permitir consolidar el cultivo de la patata en la comarca de A Limia, además de impulsar otros. El proyecto actúa sobre una superficie regable de 2.576 hectáreas y beneficia a 1.822 agricultores.
Planas, ha subrayado este viernes que las inversiones en modernización de regadíos forman parte de las prioridades del Gobierno para la nueva legislatura, ya que el cambio climático exige acelerar la transición hacia un modelo de producción agrícola más sostenible, que se caracterice por un menor y más eficiente consumo de agua y de energía.
El ministro ha explicado que el regadío sostenible es irrenunciable para asegurar una producción de alimentos suficiente y porque incrementa las posibilidades de futuro de la actividad agraria y de los jóvenes. “No se trata solo de producir, sino de hacerlo bien, en cantidad, calidad, y de forma medioambientalmente sostenible”, ha afirmado.
Por ello, el Gobierno ha renovado para esta legislatura su compromiso con la modernización, con una apuesta que va a suponer una inversión de más de 2.340 millones de euros hasta el año 2027, una cantidad sin precedentes. “Hacemos un gran esfuerzo en movilizar recursos para la mejora del regadío porque es el futuro de nuestra agricultura. Creo en el regadío sostenible y eficiente, el agua es un bien precioso y aprovechar cada gota aumenta la rentabilidad de los agricultores”, ha asegurado.
Esta inyección está acompañada además de una serie de medidas para dinamizar la toma de decisiones y agilizar los procesos para la ejecución de los proyectos con todas las garantías ambientales, técnicas y legales correspondientes.
Esta apuesta inversora, ha dicho el ministro, es una muestra más del inequívoco compromiso y apoyo del Gobierno a los sectores agrario y pesquero, que forman uno de los pilares fundamentales de la economía española. Ha recordado el volumen de ayudas extraordinarias habilitado para hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania y de la sequía. Solo en Galicia se han abonado en el último año y medio 142,7 millones de euros en ayudas directas, de los que 79 millones corresponden a la ganadería, con el sector lácteo como principal beneficiario.
El ministro ha recordado que el Proyecto Estratégico para la Reforma y Transformación Económica (PERTE) Agroalimentario contempla una línea de ayudas de 200 millones de euros para la digitalización del ciclo del agua de las comunidades de regantes. El plazo de la primera convocatoria, por 100 millones de euros, estuvo abierto hasta hace un mes, y está prevista la realización de una nueva por la misma cantidad.